Con Australia, ya son cuatro los países en los que es posible consumir este tipo de producto.
En las próximas semanas, establecimientos seleccionados de Australia comenzarán a recibir carne celular elaborada por la startup Vow. Estos establecimientos podrán libremente servir pedidos de carne cultivada de codorniz japonesa que se comercializarán bajo la marca Forged.
La inminente decisión de la Food Standards Australia New Zealand (FSANZ), la equivalente a nuestra EFSA, ha permitido que Australia se haya convertido en el cuarto país del mundo en el que es posible consumir carne celular. Primero fue Singapur, luego EE.UU (aunque sólo en 2 estados y en locales muy seleccionados) e Israel (de forma limitada).
Actualmente la startup Vow, con sede en Sydney y con George Peppou al frente, cuenta con un biorreactor de cultivo celular de 20.000 litros, diseñado y construido por ex-ingenieros de SpaceX con un coste inferior a $1 millón. Todo un hito. Y ya son capaces de producir más de 800 kg. de carne cultivada en una sólo semana.
La innovación se abre paso y poco a poco son varios los países que se suman a las nuevas posibilidades (REALES) de consumo de cultivos celulares.