Con uvas que han sido utilizadas para la elaboración de vino concretamente. Y es que ya van dos los post que publico esta semana dedicados a la revalorización de subproductos procedentes de otras industrias. Y no hablo del futuro, hablo del presente inmediato. Ya no es una tendencia, es casi una obligación en nuestro sector.
El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) – España, ha logrado nuevamente posicionarse como uno de los centros más activos e innovadores de nuestro país. Con una historia de más de veinte años ayudando al sector agroalimentario a ser más competitivo y rentable cuenta con numerosas iniciativas de éxito en el campo de la investigación en el sector. Ahora, también se le debe la creación de un snack de maíz, tipo nacho, de alto valor nutricional elaborado a partir de harina de uva garnacha y pieles de nectarinas.
El producto, completamente desarrollado y testado, consiste en un nacho de maíz y fruta, sin azúcares añadidos y con un alto contenido en fibra y proteína. A través de un proceso de recogida selectiva y reaprovechamiento se obtiene una harina a partir de los hollejos de la uva garnacha (después de elaborar vino) y pieles de frutas como la nectarina. La elección de estas dos frutas ha sido debido a su alta disponibilidad en la zona además de por sus altos contenidos en fibra y compuestos fenólicos bioactivos (antioxidantes).
Esta harina de fruta se mezcla con harina de maíz, en menor proporción y mediante extrusión se elaboran unos snacks en forma de nachos. «Dipea Mediterráneo» es el nombre propuesto en el Itacyl para un nuevo producto que sirve de acompañamiento ideal a hummus, guacamole o un tapenade pero con propiedades nutricionales realmente interesantes.
Dipea Mediterráneo es el fruto de la colaboración conjunta de diversas instituciones dentro del proyecto Allfruit4All, liderado por el Itacyl en colaboración con el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA), la Universidad de Valladolid y la Universidad Rovira i Virgili.