Inmersos en plena tendencia de las bebidas sin o con baja graduación alcohólica hay productos que parece que van a contracorriente e incluso incongruentes. Es el caso de los helados con alcohol. Algo que no es nuevo pero que se perfila como una tendencia al alza.
Siempre he dicho que el sector de los helados es de lo más innovador del mercado. Cada año las marcas se superan con nuevos sabores, ingredientes e incluso con colaboraciones entre marcas que a priori poco tienen que ver entre sí (léase por ejemplo Donuts o Nocilla entre otras muchas).
Un mercado todavía pequeño pero en constante crecimiento es el de los helados con alcohol. Un nicho de tan sólo $1.500 millones a nivel global pero que presenta tasas de crecimiento cercanas al 7% año a año. El 2025 quizá sea el año en el que definitivamente se asiente la categoría. Veremos.
El helado con alcohol responde a la demanda de productos con un valor añadido más allá del nuevo sabor de moda. Con una graduación que oscila entre los 2º y los 4º por cada 100 ml. se presentan como una opción atractiva para clientes con un rango de edad entre los 20 y los 40 años y especialmente mujeres (datos de BuzzBar, firma líder en el sector).
Pero el alcohol no es su único reclamo. Ingredientes de calidad como chocolates de origen, piña de Costa Rica… se combinan con infusiones de primeras marcas como Martini, Absolut o Baileys para justificar un precio mayor que las versiones clásicas sin alcohol.
Sin embargo existen retos que podrían frenar completamente en seco su expansión. Y es su regulación. ¿Cómo se vende esto? evidentemente a mayores de 18 años pero ¿Dónde se colocan?¿en la sección de congelados o en la sección de bebidas alcohólicas?

Llegan los helados con alcohol, exclusivamente para adultos