Es difícil ignorar la sobreexposición a los productos con proteína que estamos viviendo en los últimos años. Ya casi es imposible encontrar alguna categoría de producto que no haya sido «bendecida» con el don de la proteína. A esto le quedan todavía unos años pero en algún momento, de forma irremediable, lo veremos bajar del pedestal donde ahora mismo está situado. Por varias razones además.

Alimentos y bebidas enriquecidas con fibra, la nueva tendencia
Una de las razones más a corto plazo es que nuestro organismo puede asimilar una cantidad limitada. Un exceso puede provocar, en su fase más leve molestias como diarrea y vómitos pero también aumentar considerablemente el riesgo de arteriosclerosis. Pero una parte muy importante de un consumo excesivo es sus efectos sobre la microbiota, esa colonia de bacterias beneficiosas que residen en nuestro sistema digestivo.
Y aquí es adonde quiero llegar. Veremos a medio plazo, en unos años, la microbiota como la gran «tendencia» en la salud. Hoy estamos viendo el alzamiento del GLP-1, será algo parecido e incluso mayor. Tratamientos médicos, dietas… y como no, alimentos y bebidas diseñados para el cuidado de nuestra microbiota.
Uno de los mejores aliados de nuestro microbioma es sin duda la fibra. Un nutriente al que le damos poca importancia y del cual, por norma general, no podemos presumir de un consumo adecuado. ¿Veremos alimentos y bebidas enriquecidas con fibra? Un rotundo SÍ.