Parece ser que en un árbol originario de la India y sudeste asiático podría estar la llave para la fuente de proteínas vegetales sostenibles y abundantes pero también con enorme potencial para la fabricación de biocombustibles.

En el estado de Florida – USA, llevan más de una década plantando Pongamias en sustitución de árboles cítricos que están muriendo debido a plagas y enfermedades. Este árbol además de proporcionar sombra, produce unas pequeñas habas marrones que por sí mismas no tienen ningún interés a nivel gastronómico ya que son tan amargas que ni los cerdos las quieren. Tras un proceso, de las semillas de la Pongamia se extrae una proteína de alta calidad susceptible de ser usada en panadería, repostería pero también en bebidas. Además de la proteína, en formato harina, también se extrae un aceite que puede usarse para biodiesel e incluso combustible para aviación.

Este árbol, emparentado con la planta del guisante y habas, es hiper resistente. Crece y florece en condiciones de sequía extrema pero también con lluvias abundantes. No requiere de ningún tipo de atención y sus frutos se recolectan con mucha facilidad. Terviva, una empresa norteamericana fundada en 2010, es la encargada de fabricar harina proteica con las semillas de la Pongamia y procesar el aceite para su uso industrial.

Mitsubishi Corporation es la encargada de transformar el aceite vegetal proporcinado por Terviva, en prometedores biocombustibles.