No, no le ha pasado nada a mi teclado. Como siempre intentaré explicártelo de una forma sencilla y breve. Hablo de proteínas esenciales presentes en leche materna de los mamíferos.

Hasta la fecha el Santo Grial era (y sigue siendo) la obtención de lactoferrina de suero para su destino a leches de fórmula, la de los biberones de los bebés. La fermentación de precisión pronto se vio como una técnica de enorme potencial para la obtención de esta proteína de una forma más o menos económica y sin necesidad de animales. Con bacterias. Aquí domina el mercado la startup TurtleTree de Singapur que ya ha obtenido luz verde para su comercialización.

La lactoferrina es un ingrediente super premium para algunas leches de fórmula así como tratamientos contra la anemia ferropénica. El problema es que hay una enorme demanda y la oferta está descompensada. Se necesitan en torno a 10.000 litros de leche para la obtención de 1Kg. de lactoferrina. Yo mismo he contactado con un proveedor para comprar a poco más de 500€, 1kg de lactoferrina con un 96% de pureza. Suena a otra cosa, lo sé. Pero es la realidad.

Así que muchas empresas se han embarcado en la carrera de obtener este valioso ingrediente. Y otras muchas también han abandonado por las dificultades y el alto coste que requiere su producción. Una de estas empresas, que no ha abandonado del todo pero si pivotado hacia otros segmentos, es la británica Better Dairy que ha descubierto otro lucrativo ingrediente y con un mercado menos explotado. El de la osteopontina.

Otra proteína presente en la leche materna y que todo apunta a que tiene un especial protagonismo en la absorción del calcio, el buen funcionamiento del sistema digestivo y en el desarrollo del sistema inmunológico. En los bebés es especialmente importante ya que estudios científicos apuntan a que contribuye al desarrollo cerebral.

La osteopontina está presente en la leche de vaca aunque en menor proporción que en la leche materna humana aunque su extracción de forma natural puede conllevar a numerosos problemas de tipo ético. Así que de nuevo la técnica de la fermentación de precisión acude en ayuda de la industria.

Obtener osteopontina de leche de vaca es incluso más costoso que obtener lactoferrina y la versión recombinante, producida con ADN, es una opción pero no menos económica. Better Dairy ya ha sido capaz de producir de forma viable ostepontina en escala comercial a la espera de obtener el estatus GRAS (Generally Recognised As Safe) para comenzar a comercializarlo en EEUU.